El pueblo no reclama a sus autoridades por la falta de atención médica. En Semana Santa se purificaron en “El Lavado de Pies”. Pura pantomima.
El centro de salud no cuenta con atención médica desde enero del 2010. El sábado 17 de julio y el 28, tanto en la Gobernación como en la Municipalidad se invocó por cuidar la salud de la población.
El 22 de julio a la señora Luz Sáenz Álvarez le cayó el carrizo de un cohete rompiéndole el cuero cabelludo y como no había médico en el Centro de Salud, recurrió a Essalud donde tampoco tenían material necesario para suturar la herida. Su esposo, el médico Alberto Fernández, tuvo que intervenirlo con pinzas inadecuadas.
El señor Percy Herrera nos refiere que en la iglesia, durante el baile, una señora cayó al piso rompiéndose la cabeza. Nadie le prestó los primeros auxilios y su hijo, estudiante de medicina, tuvo que hacerlo.
El 29 de julio, en la casa de la familia Vásquez, Devoto de la Subida, una niña de las iniciales IRE se lesionó el pómulo y fue atendido por el técnico Pedro Huanca del Centro de Salud.
Estos son algunos casos palpables sucedidos en los días de fiesta en la ciudad de Cabana.
Sucede que la población de Cabana desde enero no cuenta con un médico, pues la titular fue destacada. Por unos días se hizo presente la médica de Conchucos que fue destacada a Cabana, la misma que tuvo que retornar a su puesto de origen gracias al reclamo de las autoridades de Conchucos que no permitieron este atropello.
¿Con qué presupuesto se ha pagado a la médica?, porque los recursos propios del Centro de Salud no son para pago de remuneraciones sino para adquirir medicina y pago de servicios básicos que tanta falta hacen. ¿El cuadro de asignaciones de personal del Centro de Salud está completo? ¿Hay más personas destacadas?. ¿Se está desmantelando el Centro de Salud de la Capital de la provincia de Pallasca? ¿Quién debe defender la salud del pueblo? A estas interrogantes el alcalde respondió que se formaría una comisión especial para que viaje a Chimbote.
Esperamos que tengan resultados positivos, porque así como van las cosas, siempre la indolencia continuará.
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